“Hoy, esta casa donde se traficaba muerte y se hacía el mal, se convierte en un lugar donde se da vida y se hace el bien”,
afirmó el gobernador Osvaldo Jaldo, visiblemente conmovido.
El pasado 7 de octubre en la ciudad de San Miguel de Tucumán se inauguró la Casa de Acompañamiento Integral para Mujeres con adicciones del Hogar de Cristo con la presencia de autoridades provinciales y municipales.
El Gobernador destacó la importancia del trabajo conjunto entre la comunidad y las autoridades para enfrentar el flagelo de las adicciones: “La droga es un problema de todos, y nadie puede mirar para otro lado. Este hogar es solo el comienzo; debemos seguir creando espacios que ayuden a quienes lo necesitan”. Jaldo recordó el proceso de recuperación de la casa, que antes se encontraba en condiciones deplorables: “Aquel lugar, casi destruido, hoy se convierte en un hogar para mujeres que buscan recuperarse y reinsertarse en la sociedad”.
Al mismo tiempo, subrayó el papel crucial de la ley del Narcomenudeo, que permite a las autoridades provinciales actuar contra el narcotráfico en pequeña escala. “No podemos tener miedo de tomar decisiones políticas frente a problemas reales. Este gobierno no vacilará en la lucha contra quienes comercializan sustancias tóxicas”, aseguró. «Debemos salir a contagiar a todos los tucumanos y tucumanas sobre la importancia de combatir juntos este flagelo. La droga es un problema de todos, y juntos podemos ofrecer soluciones y apoyo a quienes lo necesiten”, finalizó el Mandatario provincial.
Mientras que el Ministro Público Fiscal, Edmundo Jiménez, acompañado del ex subsecretario de deporte de la nación y dirigente del MSD, el tucumano Víctor Lupo, destacó la importancia de la inauguración de la Casa de Acompañamiento, un espacio que simboliza el trabajo conjunto entre el gobierno provincial y la Iglesia. “Hicimos contacto con el poder Ejecutivo para poner esta casa en condiciones y se hizo toda la construcción que ustedes ven aquí”, afirmó Jiménez.
El decomiso de esta casa, se dio a raíz de una investigación, iniciada en marzo y finalizada en junio del año pasado, por parte de la Unidad Fiscal de Narcomenudeo (UFINAR) del Ministerio Público Fiscal. Fue entregada al Arzobispado de la provincia junto al Hogar de Cristo a instancia del prestigioso cura villero Padre Pepe Di Paola.
Este nuevo hogar, único en el noroeste argentino, estará a cargo de la organización de los Hogares de Cristo, encargada de brindar la atención y contención necesarias a las mujeres en situación de adicción. “Es una cosa muy emocionante ver cómo hemos logrado este espacio”, declaró el Ministro, subrayando que la casa ya está operativa y funcionando. “Ya tenemos a algunas mujeres que han llegado, incluyendo una de Pichanal. La necesidad es grande en el norte”, agregó.
El Ministro también valoró la presencia del Gobernador en el evento: “Su participación es fundamental, ya que él fue quien construyó y puso en condiciones toda la casa. Este es un esfuerzo conjunto, porque la lucha contra la droga es un problema de todos”, enfatizó.
La casa tiene capacidad para albergar hasta 20 personas y contó con la colaboración del Ministerio de Salud, que ha aportado mobiliario y personal médico. “Estamos trabajando para mejorar las instalaciones, incluyendo aire acondicionado y espacios para los niños, porque es fundamental no separar a las mujeres de sus hijos”, explicó Jiménez.
Estuvieron presentes en el acto monseñor, Carlos Sánchez; el monseñor Auxiliar, Roberto Ferrari; el vicario general, José Abuin y el delegado episcopal de los hogares de Cristo, Marcelo Durango con la vocal de la Corte, Eleonora Rodríguez Campos; el ministro de Gobierno y Justicia, Regino Amado; el ministro de Salud, Luis Medina Ruiz; el ministro de Desarrollo Social, Federico Masso; la Intendente de San Miguel de Tucumán, Rossana Chahla; el secretario de Políticas Integrales Sobre Adicciones, Lucas Haurigot Posse; la intendente de Alderetes, Graciela Gutiérrez; el vicepresidente de la Legislatura, Aldo Salomón; el jefe de Policía, Joaquín Girvau, los legisladores, Hugo Ledesma y Gerónimo Vargas Aignasse, como así tambiéndirigentes de clubes deportivos, comedores e instituciones de prevención de las adicciones.
La coordinadora del Hogar de Cristo Divino Maestro Tucumán, Pamela Catán, dijo que «hoy, este espacio cobra un nuevo sentido: un lugar de vida, alegría y nuevas oportunidades para las mujeres».
La Casa de Acompañamiento tiene la capacidad de albergar hasta 20 mujeres, quienes pueden venir acompañadas de sus hijos. Catán destacó las comodidades del lugar: “Contamos con dos cuartos de baño, una ducha, un cuarto de lavadero y un amplio living comedor de 60 metros cuadrados. También hay un espacio para huertas y un jardín que las chicas podrán cuidar”.
Los Hogares de Cristo ofrecen un proceso de recuperación integral. La coordinadora explicó que las mujeres comienzan asistiendo a encuentros en otros hogares, donde reciben apoyo básico. Luego, aquellas que deseen avanzar pueden quedarse en la casa, donde recibirán atención las 24 horas, con profesionales que brindan apoyo terapéutico y espiritual.
Es fundamental que las mujeres puedan venir con sus hijos. Contamos con un equipo dedicado a los niños, asegurando que tengan una rutina normal. Así, ellas pueden enfocarse en su proceso de recuperación», agregó Catan. Y añadió: «Es un espacio donde se recupera la vida y se construyen nuevas oportunidades».