Racismo en el deporte: A 54 años de los Juegos Olímpicos México ´68

Jul 11, 2022 | Carta de Lectores, Últimas Noticias

Atletas negros hicieron el saludo del «Black Power», Poder Negro

Por: José Luis Ponsico (*)

El deporte en su expresión cultural ha tenido (tiene) manifestaciones racistas que siempre fueron condenadas. En los Juegos Olímpicos, Berlín 1936, pleno avance del nazismo en Europa, el notable atleta negro, norteamericano Jessie Owens produjo un impacto mundial.

En el Estadio Olímpico, Berlín´36 con Adolf Hitler y Estado Mayor en el palco, Owens ganó cuatro medallas de oro siendo negro. En medio de consignas racistas, la raza aria, por etnia (los blancos, rubios) que pregonaba la cultura nazi, sorprendida.

Owens, 1.80 estatura, nacido en Alabama, primavera 1913 llegó a Berlín con 23 años y sus 75 kilos de peso y físico espigado ganó en 100 metros llanos, en los 200 con vallas, en Salto en Largo (8.13 de longitud) batiendo récords que se mantuvieron 25 años.

Recién, Olímpicos, Roma´60, otro impacto de atleta afro, etíope Bikila Abeba que ganó la maratón olímpica descalzo -en Adis Abeba, capital Etiopía, Bikila «chasqui». Correo humano: la correspondencia zona montañosa, corriendo- alcanzó a Owens. La raza negra.

En México ´68 dos atletas negros, Tommie Smith y John Charles, militantes sociales de «Panteras Negras», integrantes del «Black Power», Poder Negro, produjeron otro impacto en medio de sus consagraciones y a la hora de escuchar el himno de EE.UU.

El primero ganador del oro, Atletismo, levantó el puño derecho, guante negro y cabeza gacha. Su compañero, bronce, lo mismo pero con brazo izquierdo arriba. En el regreso, suspendidos «de por vida» para competencias olímpicas. Quedaron en la historia.

En el fútbol de este tiempo la CONMEBOL organismo que administra el fútbol sudamericano pregona ahora consignas «Basta de Racismo» por hechos y protagonistas lamentables. En Buenos Aires, River-Fortaleza y Boca-Corinthians, fase anterior, hubo provocaciones.

Un plateista riverplatense en el Monumental arrojó una cáscara de banana, en el partido de Copa Libertadores. Algo similar en «La Bombonera» al mismo tiempo. El organismo los condenó a los clubes. Debieron pagar multas. Un papelón.

Europa, último cuarto de siglo con hechos graves. El futbolista Mario Balotelli, origen afro, sus padres de Ghana radicados en Italia, él niño africano luego en adopción a familia italiana, alcanzó fama como futbolista y rebelde. Debió irse. Nunca superó todo eso.

Nacido en el 92, apodado «Super Mario», 1.89 estatura, 88 kilos, atacante con mucha potencia, «estrella» en seleccionados juveniles italianos, luego Balotelli, fama y dinero se transformó en un rebelde. Con graves cruces con entrenadores. 

Pasó por el Inter, habiendo debutado en la Serie «C» con el pequeño club Lumezzone en la zona de Palermo donde creció. También hizo ciclo en el Manchester City donde chocó con Roberto Mancini, gloria del fútbol italiano. Lo quiso pelear. Estuvo en el AC Milán. Un caso.

El brasileño Dani Alves, figura en Fútbol Club Barcelona, hace algo más de una década, tiempos de Andrés Iniesta, «Xavi» Hernández, Lionel Messi siendo niño prodigio;  Puyol y Piquet en defensa y Busquets en el medio, vivió un episodio escandaloso.

El Barsa perdía con Villarreal en el Estadio Madrigal, cuando Dani Alves fue a ejecutar un córner hace casi una década. Le tiraron una banana, entera. El notable futbolista brasileño la tomó en el rincón, la peló y la comió. Un showman

El efecto resultó tal que el Barsa dió vuelta el partido. Un tiempo inolvidable cuando el «dream team» dirigido por «Pep» Guardiola conquistó 15 títulos. Por esa época Leandro Desábato el «Chavo» en Quilmes Athletic Club protagonizó un escándalo de racismo.

Copa Libertadores. Quilmes llegaba por segunda vez a la Copa. Esa vez, abril 05 dirigido por Gustavo Alfaro. Partido «chivo» en San Pablo. Estadio Morumbí. El «9» paulista de raza negra, Edinaldo Grafite. Un «9» grandote.

Entre roces, cruces, choques, Desábato, 25 años, insulta al brasileño «Negro de mier…Macaco». El delantero de San Pablo denunció al árbitro. Un comisario de Policía detuvo al defensor argentino. Estuvo 40 horas preso allá. Salió bajo fianza. Papelón. 

Desábato, nacido en la localidad agropecuaria de Cafferatta, Santa Fe, con el tiempo mostró arrepentimiento. Se destacó en Estudiantes de La Plata, donde llegó a ser DT.

y un supuesto formador de juveniles.

Martin Luther King, Pastor evangélico estadounidense en tiempo del Poder Negro en un acto considerado «el de la mayor congregación social por la lucha de los derechos sociales» en Washington, reunió algo más de 400 mil manifestantes. El recuerdo se agiganta.

En el acto Luther King aludió, discurso inolvidable, a la expresión: «Tengo un sueño» en su rémora a igualdades y fin de los movimientos racistas como el temido «Ku Klux Klan», cuyo origen data de 1865. Aunque el rebrote se produjo en los ´50 del siglo anterior.

Grupos racistas, fanáticos, supremacía de raza blanca. Profundamente segregacionista. Homofóbico, anti comunista, cercano a «escuadrones de la muerte». Llevado al cine en el memorable «Mississippi en llamas» de Alan Parker con Gene Hackman. Estrenada en 1988.

Es natural que la condición humana en el deporte o cualquier otra actividad social deban cumplir algunos requisitos. Estados Unidos desde la Guerra de Secesión, Norte contra el Sur, esclavitud (raza negra) produjo 4 años de enfrentamientos 1861/65, hoy sin solución.

Ocurre en el país considerado más importante del planeta. Donde conviven algo más de 8.500 millones de habitantes. De los cuáles el avance de China sobrevuela un cuarto de la población total (1.400 millones). El racismo sigue siendo un tema a resolver.

Aquella instancia del «Black Power», Poder Negro en EE.UU. apenas un recuerdo. Lo que queda como conclusión es que la intolerancia es tan antigua como la propia humanidad.

(*) Columnista de La Señal Medios, Libre Expresión, Mundo Amateur y Agencia Nacional y Popular

Fuente: Mundo Amateur – Historia Hoy

Julio 2022.

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