Un proyecto de inclusión que ahora también sumará a las mujeres
Juegan en la 21-24 de Barracas y en La Cárcova. Integra a los chicos y busca reducir la violencia.
Práctica de cricket entre jóvenes de la villa 21-24 de Barracas
No son descendientes de ingleses ni forman parte de un club de elite, pero si les dan a elegir entre una pelota de fútbol o un bate y una bocha todos se inclinan por la segunda opción, para jugar al cricket. “¿Al qué?”, le preguntan a Maxi Rubin sus compañeros de colegio. El les explica que “es un deporte parecido al béisbol, que tiene dos bases en lugar de cuatro, y que al principio parece difícil pero después se pone bueno”. Este nene empezó a jugar a los ocho en el equipo Caacupé de la villa 21-24 de Barracas. Hoy tiene 13 y muchas medallas en su casa, que ganó “boleando” y “fildeando”, según le contó a Clarín.
Como él, cada vez son más los chicos que participan de Cricket sin fronteras, un proyecto de inclusión para jóvenes de barrios carenciados. Seis de sus jugadores hoy forman parte de la Selección Argentina Juvenil en distintas categorías, cuatro de ellos ya fueron campeones sudamericanos en dos oportunidades. Y van por más: el interés de las mujeres motivó que este mes abrieran la convocatoria para armar equipos femeninos.
“La iniciativa arrancó en 2009 en la 21-24 y sólo por Caacupé ya pasaron más de 60 chicos. A fines del año pasado, la replicamos en villa La Cárcova, en José León Suárez, donde tenemos 15 jóvenes en las prácticas y otros 100 en lista de espera”, cuenta Daniel Juárez, coordinador de este proyecto que nació con el objetivo de integrar a los chicos entre sí, conectarlos con pares de otros ámbitos –para reducir la discriminación y la brecha social– y trabajar en la prevención de la violencia y las adicciones.
La idea la acercó Juárez, que además de contador de la parroquia Caacupé es manager de la Selección Argentina de Cricket Juvenil. “En ese momento, el Padre Pepe Di Paola estaba a cargo de la iglesia. Él se entusiasmó con la propuesta y luego recibimos el visto bueno del entonces cardenal Jorge Bergoglio”, agregó Juárez.
A través del boca a boca, los chicos del barrio se animaron a probar el nuevo y exclusivo deporte, pero que en India, por ejemplo, es el deporte más popular. Así llegó Alexis Gaona (16) hasta el entrenamiento en el Centro de Formación Profesional (CFP) Padre Daniel de la Sierra de Pompeya. Este adolescente se inició en la actividad a los 10 años y, de la mano del cricket, además de hacerse muchos amigos pudo viajar. “En 2011, me convocaron para la Selección Argentina y gracias a eso jugué en Perú”, relata este chico que sueña con hacerse famoso y “conocer el mundo”. “Por eso, también estudié inglés y me gustaría seguir aprendiendo por si se me da la posibilidad de ir a Inglaterra”, agregó ilusionado.
En la semana, los chicos, de entre 8 y 17 años, realizan prácticas en el CFP con palos de plástico y pelotas de goma, mientras que los sábados y domingos usan el kit oficial, que incluye los bates de madera, cascos y protecciones, y juegan en las canchas grandes del Lomas Athletic Club, del San Albano o el colegio San Jorge de Quilmes. “Por suerte, nos prestan las instalaciones. El problema es que no nos alcanza para pagar los micros para trasladarnos hasta allá”, explicaJuárez. Y agrega: “También nos hacemos cargo de desayunos, almuerzos y meriendas, según el caso. Eso no puede faltar porque a veces los chicos vienen sin comer”.
Pero, a pesar de las dificultades económicas, Cricket sin fronteras no se achica. Y, de hecho, sigue sumando integrantes. “El equipo de mujeres es una cuenta pendiente que tenemos, por eso, ya empezamos a repartir panfletos en los asentamientos invitándolas. La idea es armar uno en cada barrio, tenemos más de 15 interesadas entre la 21-24 y La Cárcova”, agregó Daniel.
Además, el Papa Francisco invitó a los chicos de Cricket sin fronteras a jugar un amistoso al Vaticano contra un equipo de seminaristas y curas jóvenes que armó en 2013. Este partido, que busca llevar un mensaje inclusivo, se viene postergando porque, hasta el momento, no logran juntar la plata para pagar los 20 pasajes a Roma (15 de los chicos y cinco del cuerpo técnico). “Estamos terminando de cerrar arreglos con algunos sponsors, si todo sale bien en los próximos meses deberíamos viajar”, explicó Juárez.
Fuente: Clarín – Por Paula Galinsky – Foto: (AP Photo/Natacha Pisarenko)
13 junio de 2016