Miniserie documental
Historias de deportistas comprometidos, con militancia política y firmes convicciones, que fueron desaparecidos durante la última dictadura cívico militar (1976-1983).
Cada capítulo recorre sus vidas y sus trayectorias como atletas y militantes, pertenecientes a una generación que dejó huella indeleble en la historia de la Argentina.
Dirección: Julio Santamaría y Carlos Eduardo Martínez
Guión: Gustavo Veiga
PRESENTACIÓN
En el Centro Cultural de la Cooperación – Sala Tuñón – Av. Corrientes 1543 -CABA
5 de Agosto – 19 horas
La Plata Rugby Club (Rugby)
Alicia Alfonsín (Básquet)
12 de Agosto – 19 horas
Gustavo Bruzzone (Ajedrez)
Adriana Acosta (Hockey)
Daniel Schapira (Tenis)
20 de Agosto – 19 horas
Gustavo “Papilo” Olmedo (Fútbol)
Daniel Schapira (Tenis)
Miguel Sánchez (Atletismo)
A la presentación asistirán Claudio Morresi – Secretario de Deportes de la Nación; Taty Almeida – Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora; Juan Carlos Junio – Diputado Nacional
DATOS DEL DOCUMENTAL
Realizada en 8 capítulos, la miniserie para televisión “Deporte, desaparecidos y dictadura” se basa en el libro homónimo de Gustavo Veiga, dirigida por Julio Santamaría y Carlos Eduardo Martínez.
Filmada en Chilecito, Los Sarmientos, Santa Fe, Santo Tomé, Paraná, Gran Buenos Aires, Capital Federal, La Plata, Mones Cazón, Roque Pérez, Mercedes y también Brasil, trata sobre la historia de militantes políticos de diferentes agrupaciones que fueron secuestrados y desaparecidos por la última dictadura cívico-militar. Todos eran deportistas federados que, en muchos casos, se destacaron en sus respectivas disciplinas entre fines de los años 60 y principios de los 70.
A lo largo del trabajo se intenta demostrar que su compromiso dejó una huella que se tradujo en más militancia y sensibilidad social heredadas por la generación de sus hijos. La historia de la jugadora de hockey Adriana Acosta impulsó la creación de la ONG “Un puente posible”, que forma a niñas de barrios carenciados en el deporte que practicaba la atleta desaparecida.
En Santa Fe, Rodolfo, el hermano mayor de Gustavo Bruzzone, mantiene una escuela de ajedrez que lleva su nombre. En Berazategui, el Colegio de Enseñanza Media Ernesto Che Guevara, se suma todos los años a la organización de una de las tantas Carreras de Miguel que se corren en el país en homenaje al fondista desaparecido en enero de 1978.
La miniserie muestra imágenes y testimonios que permanecían inéditos hasta hoy, como la última prueba de San Silvestre que corrió Miguel Sánchez el 31 de diciembre de 1977 o el relato de los últimos días que pasó Adriana Acosta en el centro clandestino de detención el Banco antes de ser trasladada presuntamente en los vuelos de la muerte. Claudio Tamburrini, futbolista y filósofo que logró escapar de Mansión Seré, un campo clandestino de detención de la Fuerza Aérea, habla de Antonio Piovoso, quien como él jugaba de arquero.
Cerca de sesenta entrevistas, documentos originales que conservan las familias, imágenes en Súper 8 donde se observa a los deportistas desaparecidos y una investigación pormenorizada en archivos fílmicos y hemerotecas redondean un trabajo que debe analizarse como un fresco de época.
En los años previos a la dictadura que provocó un genocidio en la Argentina a partir de 1976 se vivió un auge del movimiento de masas. En el peronismo o la izquierda, en la militancia estudiantil u obrera, una generación se jugó el pellejo. Los casos que contiene esta miniserie tienen en común que todos eran deportistas y muy jóvenes. Pero el trágico final que los esperaba fue porque se comprometieron por sus ideales. Deporte, Desaparecidos y Dictadura busca humanizarlos, mostrarlos en su vida cotidiana, con sus aciertos y sus errores, sin sacralizarlos, pero sí con un claro objetivo: sacarlos de su cuasi anonimato y hacer un tributo a su memoria.
Fuente:Carlos Martínez
29 de julio de 2013
martinezcine@gmail.com