La Secretaría de Deportes subejecutó en 2016 $392 millones (casi un tercio del presupuesto global). Esto hizo que para el corriente ejercicio la Subsecretaría dispusiera de 100 millones de pesos menos, pese a que el global de gastos del Ministerio de Educación se incrementó en 30,5%. Es la primera vez que se le bajan los fondos a Deportes desde el 2001.
La gestión en la primera temporada de Carlos Javier Mac Allister no fue de las más provechosas para el deporte nacional. El Secretario de Deportes (ahora dentro del marco del Ministerio de Educación y Deportes en lugar de depender de Desarrollo Social como su predecesor, “Camau” Espínola) había anunciado a fines de febrero de 2016 que el ministro Esteban Bullrich le había conseguido al área alrededor de mil millones de pesos, casi duplicando los $535 millones que se habían previsto en el presupuesto que cerró, de apuro, la administración K a comienzos de noviembre de 2015.
Cuando se publicaron los números finos para la cartera dirigida por Bullrich, el total aumentó ya que la suma de los programas 17 (Desarrollo y fomento del deporte social y alto rendimiento), 18 (Asistencia médica y antidoping) y 6 (actividades comunes a ambos) totalizaba $1.315 millones, casi u$s94 millones, dejando muy atrás el anterior récord en dólares de 50 millones para la temporada 1995 en la que el gobierno menemista puso toda la carne al asador para preparar los Juegos Panamericanos de Mar del Plata.
Mac Allister no se mostró como un administrador preciso. Dentro de un ministerio que ejecutó el 88% de los dineros disponibles para el ejercicio 2016, el Colo se quedó bastante atrás. Para las actividades comunes devengó un porcentaje parecido al global de la cartera (89,46%) debido a que con ese programa debe pagar sueldos y gastos fijos. En cambio, en los proyectos de alto rendimiento y desarrollo deportivo en todas las áreas de la sociedad, para los que gozaba de $1.106 millones, dejó sin invertir casi una tercera parte de lo que podía utilizar para mejorar las condiciones generales del deporte nacional. En total, Mac Allister dejó pasar -como a un puntero ligerito- un acumulado de $392 millones en sus primeros 12 meses de gestión, una subejecución del 29,8%. De hecho, el monto no gastado equivale al 87% de los $450 millones que se reservaron específicamente para becas y sustento del alto rendimiento en el año olímpico.
Evidentemente esos valores negativos no fueron bien vistos en Educación ni en Economía. Si al Ministerio para el 2017 le correspondió un aumento global del 30,5% con respecto al año previo (pasó de disponer $100.412 millones a tener una promesa de $131.030 para el corriente ejercicio), la Subsecretaría de Deportes fue “castigada” con un recorte de más de $100 millones ya que tiene pautados $1.211 millones para el año, una merma del 8%.
Lo que preocupa es que se trata del primer ejercicio en más de 15 años en el que el presupuesto del área Deportes sufre una quita con respecto al año previo; algo que no ocurría desde el infausto 2001 cuando los técnicos veían venir la debacle institucional, una “medalla” que ahora luce Mac Allister.
ERNESTO RODRÍGUEZ III
@EPHECTO
Fuente: Olímpicos Argentinos
27 abril de 2017
https://olimpicosargentinos.com.ar/2017/04/27/colo-en-rojo/