Dice un viejo refrán “que el Hombre es el único ser viviente que se tropieza una y otra vez con la misma piedra”. Los dirigentes de nuestro deporte una y otra vez confirman la sentencia y lo podemos ver analizando los resultados de los últimos Juegos Odesur.
Argentina que dominó con soltura los primeros Juegos Suramericanos se viene cayendo a los tropezones porque sus dirigentes se han extraviado en la búsqueda de talentos, basta mirar el siguiente gráfico donde se ha representado el total de medallas obtenidas sobre el total de medallas puestas en juego en las 10 competencias disputadas.
Lo que nuestros dirigentes saben es que Argentina es una fuente inagotable de talentos, pero lo que no advierten es que para que esos talentos se expresen es necesario que exista mucha competencia y aquí está el nudo del problema y en dónde se pierden.
Se quedaron con la selección (o búsqueda) y se olvidaron del fomento deportivo. Obviamente es mucho más fácil ir a una competencia y reconocer al mejor que promocionar, iniciar, conducir (esto es fomento) el desarrollo de una práctica deportiva. Pero hoy donde existe muy poca competencia (muy poca práctica de deporte organizado) los talentos son pocos o de poco talento.
En los años setenta en Mendoza (solo para dar un ejemplo) jugaban al básquet cerca de sesenta equipos con todas sus categorías hoy les cuesta juntar doce para hacer un campeonato. Este panorama se extiende hoy a casi todas las disciplinas. Algo tendrán que revisar los dirigentes deportivos. Y sería importante que pensaran que los talentos son fruto de las condiciones personales, del entorno que se brinda para la práctica y de la competencia, no como creen ahora que es posible sacar talentos del laboratorio.
Está claro que no existe una idea de desarrollo de la práctica, como tampoco tiene claro para qué sirve esta práctica. Los dirigentes deportivos del gobierno levantan los dos brazos atajándose y dicen nosotros estamos para apoyar lo que hacen las asociaciones y federaciones, ellas son las responsables del desarrollo del deporte otra cosa no podemos hacer. Pero si tuvieran en claro los objetivos, al menos el de obtener más medallas, en vez de otorgarles subsidio tras subsidio para que viajen los seleccionados deberían modificar las condiciones de estas ayudas y decirles, por ejemplo, no les vamos a dar nada hasta que aumenten la cantidad de participantes en sus torneos o no les doy para viajar pero si les doy para que disminuyan los costos que deben afrontar los clubes en planillas, árbitros, o algún otro gasto que les ayude a no dejar la actividad o que los incentive a retomarla.
Los dirigentes federativos, por otra parte, tienen que equilibrar su balanza; menos ambición de poder por más vocación por la práctica deportiva.
El Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires ha llamado a licitación para la construcción de obras para los Juegos Olímpicos de la Juventud 2018. Estos juegos son una excelente oportunidad para fomentar previamente el deporte con torneos locales, provinciales y nacionales, hay tiempo y hay materia prima, sólo falta juntarse, discutir y ponerse en marcha. Se puede revertir así esta tendencia lastimosa. Otros países lo hicieron, el gráfico siguiente lo demuestra.
* Dirigente del Movimiento Social (MSD)- Misiones
Presidente de la Confederación Argentina de Fútbol de Salón
Fuente: Mundo Amateur
28 de marzo de 2014