Después de perder el invicto con el local México en un juego que en gran parte estuvo dominado por los argentinos, llegó el cruce por la clasificación contra el mismo equipo, en su casa y con 20.000 fanáticos a favor.
Argentina dio una muestra de carácter en esa instancia, por qué solo había perdido un juego en la fase regular y a pesar de estar 11 puntos abajo, sacó a relucir su historia que contagió a este equipo nuevo y consiguió el objetivo tan esperado y deseado antes de comenzar este agotador torneo de FIBA Américas, derrotando a los mexicanos en su propia casa.
Argentina una vez más se clasificó para los Juegos Olímpicos que serán en Río 2016, memorable, impensado en la etapa de preparación donde muchos calculaban las fechas del repechaje, pero nuestro equipo mostró que con trabajo, sacrificio y pensando cada partido contra un rival diferente, se jugó acorde a las circunstancias y la meta tan ansiada llegó como premio para todo el plantel, desde la dirigencia encabezada por Federico Susbielles, el Cuerpo Técnico con Sergio Hernández y su Staff completo, y los jugadores con dos líderes interminables como Luis Scola y Andrés Nocioni que guiaron a este joven grupo a sentarse una vez más en el sillón de la elite del básquetbol olímpico.
Argentina dio mucho más de lo que se esperaba en esta etapa de reconstrucción, tanto es así que con el correr de los partidos el equipo se asentaba y llegó a una final que con justicia se mereció.
Pero la historia de Argentina es tan grande que este premio no era suficiente para la cabeza de estos jugadores que ganaron todo, y se pusieron el objetivo de regalarnos el campeonato.
Comenzaron la finalísima contra la gran sorpresa del torneo, la Venezuela con la marca de Néstor García su entrenador, y cuando parecía que en 8 minutos de arranque los teníamos a mal traer dominando en todas las acciones, los venezolanos impusieron su paciencia ante la adversidad, su energía defensiva y tuvieron un cierre memorable, se llevaron el partido y el campeonato por primera vez en la historia de esta competencia continental.
Merecido triunfo de Venezuela que nos ganó en buena ley y que el agotamiento le jugó una mala pasada a nuestro equipo nacional.
Gran torneo de Venezuela y la derrota de Argentina no debe opacar el objetivo
conseguido por un equipo en reconstrucción.
Felicitaciones a ambos países que se ubicaron en los Juegos Olímpicos de Río 2016 como grandes representantes del continente sudamericano.
Una especial mención a los mentores de estas dos hazañas a Néstor García y Sergio Hernández, sus entrenadores que coincidentemente, son argentinos, de Bahía Blanca y productos de la Liga Nacional de Básquetbol de nuestro país.
A seguir trabajando que hay mucho por aprender; que el espacio ganado es muy difícil de lograr y ustedes lo consiguieron en buena ley.
Objetivo más que cumplido….
Fuente:www.basquetbolpicante.com;
Antonio “Chiche” Gornatti
Basketball Coach Analyst
chiche@basquetbolpicante.com;
Foto: FIBA Américas. Festejo argentino en el triunfo contra México.