Las peripecias de un chica para poder estar presente en la cita de aguas abiertas.

Nuestro país ha desarrollado desde hace más de un siglo una historia muy importante dentro de las competencias y raids de Aguas Abiertas. Gran cantidad de figuras internacionales como Antonio Abertondo, Pedro Candioti, Lilian Harrison, Horacio Iglesias, Claudio Plit, Diego Degano y más recientemente Gabriel Chaillou, Damián Blaum y Cecilia Biagioli, lo atestiguan con sus logros.
Muchas de esas figuras son del Litoral, pero también de Buenos Aires, Córdoba y Mendoza, y han jerarquizado esta especialidad que desde hace un tiempo no pasa por su mejor momento.
La nadadora de Aguas Abiertas, Candela Giordanino, se clasificó y nos representará el próximo mes en el Mundial de Singapur. Ella ha comentado a diversos medios periodísticos que necesita una ayuda económica, para mejorar la preparación previa al evento. El pasaje y su estadía estarán totalmente a cargo de World Acuatics, o sea, la entidad organizadora.
Sin embargo, no se trata solamente de ir tres o cuatro días antes y competir, eso sería propio de un manual de consejos para turistas ocasionales, ya que la diferencia horaria con Singapur es de 11 horas, por lo que necesitaría arribar a la zona horaria de competencia alrededor de 15 a 20 días antes. Eso para no sufrir de falta de adaptación al uso horario, a la temperatura y humedad diferentes, lo que se traduce en alteraciones del sueño y también en problemas gastro intestinales.
Por supuesto, debe conocer y nadar varias veces en el circuito de la competencia, observando las corrientes y la temperatura del agua. En días recientes, el periodista deportivo Gonzalo Bonadeo, seguramente el mayor difusor televisivo de los deportes amateurs, explicaba la situación y al mismo tiempo se preguntaba cómo podía suceder que no se encuentre solución a una erogación de apenas 1.200 dólares.
Me pregunto lo mismo, descartado el desinterés oficial hacia el deporte, manifestado en los menores e insuficientes presupuestos y en el escaso bagaje técnico de los encargados en dirigirlo, queda preguntarse: ¿Qué hace la respectiva Federación?
No se puede acusar de ignorancia o improvisación a las actuales autoridades de la natación Argentina, ya que dos de sus principales dirigentes han sido muy buenos nadadores y el presidente ha realizado desde hace años, diversos emprendimientos deportivos en esa misma disciplina, junto a los actuales entrenadores nacionales.
Más bien parece inoperancia, resignación, falta de imaginación o de una especulación por motivos políticos que desconozco, ya que se trata de una suma importante para una deportista, pero irrisoria para el Estado Nacional o Provincial, y también para una Confederación.
Esa pequeña erogación significará otorgar la posibilidad de competir en igualdad de condiciones, al menos en lo formal. Sería inteligente y muy bueno para la natación y para todo el deporte que las Federaciones Deportivas comuniquen al público en general, sus dificultades y a la vez que sean proactivas para encontrar las soluciones.
Los deportistas, se supone, deben dedicarse a entrenar y competir pero no a conseguir fondos, lo que debe quedar en otras manos. De lo contrario, las posibilidades de una buena actuación se diluyen, y es entonces cuando algunos evidencian que están demás en el organigrama deportivo.
* Ex Director Nacional de Deportes.
Fuente: Página 12
https://www.pagina12.com.ar/837986-el-mundial-de-natacion-y-la-representacion-nacional