Especial para Mundo Amateur
Por: José Luis Ponsico (*)
Hasta diciembre del ´83 ídolos deportivos fútbol, automovilismo y tenis, eran Diego Maradona, Carlos Reutemann y Guillermo Vilas.
La violencia en el fútbol se instaló en los años negros del plomo. Más de 200 muertes en las canchas y adyacencias.
La democracia recuperada –la dictadura «salvaje» dejó secuela de casi 40 deportistas secuestrados y asesinados; una veintena en rugby- tuvo como primera gran figura a una niña de 14 años en el tenis, Gabriela “Gaby” Sabatini.
El fútbol vivía el gran debate entre «líricos» y «tácticos» -polémica en algunos ciclos aún perdura- y la selección nacional pasaba de César Menotti, tras ocho años, a Carlos Bilardo. Agua y aceite.
El Mundial ´86 instaló para siempre en la cima a Maradona; reivindicó al DT. y puso a Julio Grondona en «cumbre» de FIFA. Argentina ganó invicta. En el voley el entrenador coreano Young Wan Sown y un grupo de notables jugadores llevaba a la Argentina al podio mundial, a principios de los ´80
Vilas tras diez años de apogeo estampaba récord: 46 torneos ganados en el circuito grande del tenis mundial. Uno de los más grandes deportistas de todos los tiempos junto a Juan Manuel Fangio, de Balcarce, automovilismo y tenis, circuito Mar y Sierras. En los ´50, el «Chueco» cinco veces campeón mundial.
Recién Rafael Nadal lo alcanzó al tenista marplatense que hizo tabla rasa en el Lawn Tennis Club de Capital Federal con 17 años. En 1970 y durante un fin de semana.
El boxeo en decadencia, tuvo a Julio César Vásquez y Marcelo Domínguez, ambos campeones del mundo. La aureola argentina primero con Nicolino Locche y luego Carlos Monzón, data de fines de los ´60 y comienzos de la década del ´70.
Entre regímenes militares de Juan Carlos Onganía y Alejandro Lanusse. Lo mismo ocurrió con el legendario Roberto De Vicenzo en golf. La democracia también vivió consagración del atleta Antonio Silio en los ´90
Los Panamericanos del`95 en Mar del Plata, segundo gobierno de Carlos Menem -Argentina no organizaba desde 1951, en Buenos Aires- instalaron al básquetbol nacional en el primer plano. En el ´90 la Argentina, sede del Mundial de Básquetbol.
En el ´92 se inauguró el CENARD Centro Alto Rendimiento Deportivo. Mar del Plata tuvo su propio complejo polideportivo en el «Islas Malvinas» en el mítico «Campo de Deportes» (Estadio cubierto, también Velódromo y Patinódromo).
Etapa previa a la llamada «Generación dorada». La ciudad «Feliz» tributó los hermanos Juan y Gabriel Curuchet, notables multicampeones del ciclismo argentino e internacional.
Los hijos de Ovidio, legendario ciclista en los ´50. Juan Curuchet medalla de oro Juegos Olímpicos de Beijing ´08, actual senador electo (Frente para la Victoria) en la provincia de Buenos Aires. Antes, titular de Deporte y Turismo bonaerense.
Nuestro fútbol tributó grandes delanteros al mundo. Desde Lionel Messi, rosarino, prodigio en Barcelona, Sergio Agüero célebre «Kun» iniciado en Independiente, los destacados. Hoy, atacantes cotizados de Europa.
Los clubes chicos lograron lo que nunca antes. En los últimos ocho años, Lanús, Bánfield, Argentinos Júniores, Arsenal, además de Vélez, cinco títulos y Ñuls fueron campeones. En el mismo ciclo River e Independiente descendieron al Nacional B
Las Leonas, hóckey femenino, a principios de los ´90. En Terrazas, España, campeones mundiales categoría Júnior, chicas argentinas hace veinte años llegaban al primer plano, luego también campeonas en mayores.
A partir del año 2000 el impacto resultó cultural: donde se jugaba mayoritariamente en colegios privados de la zona Norte (San Isidro, La Lucila) se extendió a la mayoría del país en el ámbito de la Educación primaria y secundaria.
La medida «revolucionaria» gobierno de Kirchner (Néstor y Cristina) el «fin a la explotación privada transmisiones del fútbol en Argentina». Un negocio de más de tres mil millones de pesos por año sólo de abonados al cable (agosto ´09)
(*) Columnista de la agencia Télam
10 diciembre de 2013