ARSENIO THAMIER – El Primer Director de Deportes porteño

Feb 1, 2017 | Deportistas en el Recuerdo

 

20170201educacion-fisica

Hijo de inmigrantes franceses, Arsenio Thamier nació el 22 de diciembre de 1873 en el hospital Fernández y vivió siempre en la esquina de Juan Bautista Alberdi y Lautaro en pleno barrio de Flores. Se incorporó como soldado voluntario al Ejército Argentino en 1894. En 1897 ingresó a la recién creada Escuela Militar de Esgrima. Esta institución, que formó profesionales en el área deportiva, era dirigida por el maestro de esgrima Eugenio Pini.

Thamier fue un destacado esgrimista del país. Participó en diferentes festivales y encuentros que fueron significativos en el desarrollo de esta disciplina en la Argentina. Acompañó a su maestro Pini en los primeros meses de 1903 durante una gira por diferentes ciudades europeas en la que, sin duda, enriqueció su nivel deportivo y su visión de la gestión del deporte, que luego pondría de manifiesto como funcionario.

En 1905 fue designado profesor en el curso de Gimnasia de la Segunda Escuela Militar de Esgrima, cargo al que poco tiempo después renunció, dando muestras de un espíritu crítico e inquieto: la razón fue que no coincidía con el concepto vigente de Gimnasia en el Ejército sumada al rechazo de su proyecto de reforma. Puso su propia escuela de esgrima en la calle Fray Cayetano.

Thamier editó una Guía Teórico Práctica de Educación Física para Profesores, que fue publicada en 1907, en la ciudad de La Plata.

En 1910, en el marco de las celebraciones del Centenario de Mayo, se llevó a cabo en Buenos Aires un Congreso Científico Internacional. Thamier presentó en ese ámbito un excelente documento sobre Gimnasia Militar, que mereció el reconocimiento de la Comisión Médica. De inmediato fue nombrado Inspector de Gimnasia y Esgrima, reincorporándose al Ejército. Proyectó, entonces, la creación permanente de la Escuela Militar de Gimnasia y Esgrima, sobre la base de los lineamientos que había desarrollado en el Congreso. Por su afiliación radical vio truncada momentáneamente su carrera militar.

En 1922, por resolución en el Boletín Militar Público No. 6293, es reintegrado al Ejercito y se lo promovió a Mayor designándolo Director de la Escuela de Esgrima del Ejército, en reemplazo del maestro D. Eugenio Pini, quién con igual jerarquía pasó a retiro. Thamier se desempeñó en el cargo hasta 1924, cuando solicitó su retiro, siendo reemplazado por su colega y discípulo Horacio Levene, quién ocupó la dirección hasta su definitiva clausura en diciembre de 1934.

A fines de 1919 el Concejo Deliberante creó la Dirección de Plazas y Ejercicios Físicos de la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires, anexada a la Dirección General de Paseos Públicos, con sede entonces en la amplia casona de la calle Belgrano 482.

A pedido del Presidente de la Nación, Dr. Hipólito Yrigoyen (quien conocía a Thamier de cuando con sólo 17 años empuño las armas junto a otros demócratas en la Revolución Del Parque el 26 de julio de 1990), el Intendente radical Dr. Joaquín Llambías nombró en la dirección del nuevo organismo a Arsenio Thamier, quién a su vez designó como Inspectores Generales a sus compañeros de armas Enrique Chousiño, Jorge Abalos, José D’Andrea y Juan Harraca.

Desde la Dirección llevó a cabo la instalación de la primera Colonia de Vacaciones, en las instalaciones de Parque Avellaneda, a partir de un proyecto liderado por el concejal socialista Antonio Zaccagnini. El mismo Thamier dictaba las clases de gimnasia, que se complementaban con prácticas de deportes y excursiones.

En su gestión se inauguraron secuencialmente las Colonias del Parque Tres de Febrero, de los Patricios, Saavedra y Chacabuco. En 1922 creó un Gabinete Médico para asistir a los niños de las colonias que contó en su personal, entre otros, al Dr. Carlos Zubizarreta. El Balneario Municipal se incorporó a la Dirección durante su gestión. Además fue quien creó y reglamentó la Comisión Municipal de Box.

Su obra fue vasta. Asesoró y participó en la construcción y el mantenimiento de diferentes instalaciones municipales destinadas a la práctica deportiva. Proveyó a la asistencia técnica a Clubes e Instituciones Deportivas en formación o que recibieran terrenos públicos en concesión. En esa tarea fue fundador y primer presidente de la Federación Atlética Argentina.

El primer golpe militar contra la Democracia en el año 1930, lo separó injustamente de la función pública, luego de 11 años de éxitos.

En su obra “Democratización de los ejercicios  físicos. Deberes de los poderes públicos”, Thamier expresa  su pensamiento con referencia al rol del Estado con relación a la actividad física y deportiva, precisiones fundamentales a la luz del diseño de una política deportiva municipal.

En otra de sus publicaciones (“Fomento de Asociaciones Deportivas”) expresa: “Una de las tendencias del espíritu que más se siente emulada por estas prácticas (las deportivas) es la necesidad de asociarse con fines útiles de solidaridad y de esfuerzo (…) Fomentar asociaciones de cultura física importa encauzar al pueblo hacia ideales más elevados y propicios a la realización de una Patria Grande, generosa, fuerte por su espíritu, por su cerebro y por sus músculos”.

Sin embargo su obra más significativa es el Reglamento de la Dirección General de Plazas de Ejercicios Físicos, que finalmente sancionara el Intendente José Luis Cantilo el 31 de diciembre de 1919, donde incluye con espíritu amplio y nada individualista:

Art. 1.- La creación del Consejo Superior de Plazas y Ejercicios Físicos, (cuerpo colegiado ad honorem de 10 miembros que incluye consejeros aficionados a los deportes y profesionales), que sesionando bajo la presidencia del Director General y la actuación como secretario, del Secretario Técnico de la Dirección, … solo otorgando voto al Director en caso de empate.

Art. 2 y 3.- Crea y reglamenta un Registro de Instituciones Deportivas.

Art. 4.- Crea las Comisiones Asesoras de las Asociaciones Deportivas (integrada por 3 miembros – 2 dirigentes y 1 un profesional-, propuestos por la Asociación).

Todos estos institutos son pioneros del actual Consejo Nacional del Deporte de la Ley del Deporte 20655, actualmente vigente pero sin cumplimiento.

Falleció el 2 de febrero de 1949. Recién en el año 2007, la Dirección General de Deportes de la Ciudad de Buenos Aires le rindió su primer homenaje institucional, el 21 de agosto, en el salón Gral. San Martín de la Legislatura porteña, entregándoles una distinción a su nieto, Fabián Thamier.

El mejor homenaje a su memoria es citar el artículo que a su muerte en 1949 publicara la Revista El Gráfico, cuando precisa entre otros conceptos: “Muchas conquistas del deporte que hoy son costumbre natural fueron logradas por ese hombre que sin elementos, sin dinero, sin apoyo importante, venció prejuicios y abrió rutas nuevas por las cuales pudo avanzar la juventud de entonces”.

Fuente: Libro “100 Ídolos Porteños” de Horacio del Prado y Víctor F. Lupo

Capítulo 3 – Página 20

Editorial Corregidor

Febrero de 2017

victorflupo@gmail.com;

 

 

 

 

 

 

Artículos relacionados

Artículos